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"A few years ago, the Cinémathèque Française, in Paris, screened a vintage Technicolor print of Alfred Hitchcock’s “Vertigo” made with the dye-transfer process, and it was a revelation: the deep and rich colors suggested the lurid mysticism of El Greco and the romantic darkness of Goya. The tone befits the film’s San Francisco setting, steeped in the religious aura of Spanish California, as well as its story, which hints at resurrection and redemption: an acrophobic detective (James Stewart), after the apparent death of a woman he loves (Kim Novak), meets another woman who reminds him of her, dresses her up as the late object of his obsession, and then discovers that she’s the same woman. It’s as if Hitchcock were endowing with holy wonder the miracle by which Hollywood turns a shopgirl into a star—and by which he turns an actress into the object of his own erotic fantasy. “Vertigo” opened fifty years ago, to mixed reviews. Since then, it has become one of the most celebrated and analyzed movies of all time, perhaps because it uniquely dramatizes Hitchcock’s own methods as well as the art of cinema itself."
"A few years ago, the Cinémathèque Française, in Paris, screened a vintage Technicolor print of Alfred Hitchcock’s “Vertigo” made with the dye-transfer process, and it was a revelation: the deep and rich colors suggested the lurid mysticism of El Greco and the romantic darkness of Goya. The tone befits the film’s San Francisco setting, steeped in the religious aura of Spanish California, as well as its story, which hints at resurrection and redemption: an acrophobic detective (James Stewart), after the apparent death of a woman he loves (Kim Novak), meets another woman who reminds him of her, dresses her up as the late object of his obsession, and then discovers that she’s the same woman. It’s as if Hitchcock were endowing with holy wonder the miracle by which Hollywood turns a shopgirl into a star—and by which he turns an actress into the object of his own erotic fantasy. “Vertigo” opened fifty years ago, to mixed reviews. Since then, it has become one of the most celebrated and analyzed movies of all time, perhaps because it uniquely dramatizes Hitchcock’s own methods as well as the art of cinema itself."
11 comentarios:
Y es que Hitchcock era un genio. Veré la película en cuanto pueda. :)
por supuesto, Hitchcock era un genio incontestable. Y además (igual que le pasa a Spielberg) en su momento la crítica solía tildarlo de artesano y de concentrarse únicamente en ofrecer productos de entretenimiento puro (que ya me dirás qué clase de defectos son ésos...)
era mucho más
porque el arte no es un juego de suma-cero, y tiene tantas lecturas como inteligencia quien lo disfruta
n a c o
eltiempoesungranjuez
Como hablabáis de genios, me he pasado por aquí. El arte genera nuevo arte.
¡usté sí que sabe, maestro!
n a c o
arteyfigura
7 de julio de 2009-san fermin-? guau ya me comentaras como en osaka habeis conseguido hacer realidad los viaje espacio-temporales, ¡qué envidia!
¡Rosa! de nuevo das en el clavo... de todos modos, para que la máquina del tiempo osakil funcionara correctamente, todas las noches tendrían que ser con Romy y METeoro por las cuestas de Malasaña...
n a c o
ardemadrid
pelota :P
en cualquier caso mis sandalias mas destroza-pies y yo estamos preparadas para cuando tenga a bien bajar a poner en marcha la maquina, que yo ya tengo tanto destino como fecha elegidos
pues en principio no tengo previsto ningún viaje a Madrid. Te avisaré cuando sepa algo (y así daremos envidia a Pablo jejejeje)
de todos modos, te advierto de que el condensador de fluzo funciona de pena y 'ahora mismo' te escribo desde 1973, cuando no habíamos nacido y los viajes se hacían con ácidos y jarabes para la tos
n a c o
surrealismotemporal
Por el cine del tío Alfred no pasan los años. Como el buen vino, mejora con la edad. Sus planteamientos siguen estando de actualidad y su forma de rodar ha creado escuela. No me canso de ver sus películas una y otra vez.
Curioso que cites a Spierlberg. Yo creo que las críticas a su orientación comercial a través del entretenimiento ya están superadas; su trabajo le avala y hoy día ya goza por fín de un reconocido prestigio por la Academia que, en su momento, llegó a decir que sus películas no merecían un Óscar. Lo único que me parece algo triste es que haya tenido que hacer una película "seria" como la Lista de Schinder para recibir el justo crédito que su arte merece.
¡vaya gustazo de coment! estoy de acuerdo contigo, Eva. Las películas del Alfredo no envejecen, sino crecen, y empiezan a dar la impresión de estar alcanzando "una segunda mayoría de edad" que les sienta fenomenal
nos vemos en el cine ;)
n a c o
northbynorthwest
y me gusta mucho que opines eso de estíven. Sigo pensando que los críticos minusvaloran sus películas-de-entretenimiento-puro, y que atacan su mayor virtud: divierten
los primeros 12' del último Indiana Jones son insuperables, por ejemplo
n a c o
andthelastcrusade
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